EL DRAGÓN RAMÓN

Belén la maestra de 3 años, como sabía que en nuestra aula habíamos creado un terrario, nos trajo un criatura un tanto peculiar… ¡Un pequeño dragón dentro de un tarro!

Al principio lo observamos muy detenidamente para ver su color, sus patas, sus ojos, su boca y su larga cola. Pero debíamos tener mucho cuidado, puesto que se agarraba con mucha facilidad por las paredes del tarro y… ¡Casi se escapa!

Lo primero que hicimos fue buscarle un nombre. Voro recomendó el nombre de «Ramón el dragón» y así le llamamos. ¡A todos nos gustó la idea!

Pero para poder tener un terrario adecuado para Ramón, tuvimos que mojar un poco la tierra para que no estuviese tan seca y así pudiese estar mucho más cómodo dentro de su nuevo hogar.

¡Ya lo teníamos todo preparado! ¡Quedó genial!

Tras informarnos y hacer una gran búsqueda de animales de terrario, decidimos que sería mucho mejor para Ramón que estuviese en su verdadero hogar, «La Tierra» donde Belén lo había encontrado.

Era hora de despedirse, así que abrimos el terrario y «Ramón el dragón», salió para sentir de nuevo «su casa».

¡Hasta pronto amigo Ramón! ¡Ven a visitarnos a la escuela cuando quieras jugar a la rayuela!

Alumnos/as de 2 años