DE LA CABEZA A LOS PIES

El niño nace una primera vez. Después es como si naciera una segunda vez a través de un trabajo largo y laborioso para dotarse de una identidad. Para dotarse de la cara, el cuerpo, el gesto, la acción, la palabra, el sentimiento, la emoción, la imaginación y la fantasía.

En resumen, del sentimiento del ser, de la representación, del yo y del sí mismo que le son absolutamente necesarios para ser autónomo y para distinguirse de los demás individuos y de las cosas con las que convive y de cuya interacción extrae, poco a poco, gran parte de los materiales constructivos de su identidad personal.

Fragmento de «Los cien lenguajes del niño»

Loris Malaguzzi

¿Y tú sabes…?

Inspirado en «De la cabeza a los pies»

Eric Carle

Alumnos/as de 2 años